Tu Apoteosis

Eduardo Urueta

Sergio, tu voz es un candelabro
un candelabro que se enciende
uno que adorna las noches doradas
las buenas risas, las buenas nanas
porque eres como una madre
con cuatrocientos hijos.
 
Béndito cielo, tu cielo
máldita luna, mi luna
que no te ha de tocar la noche
yo voy a darte las condolencias
por la asorada muerte de tu cuna
ahora eres un viejo con barba
que no dispensa arrugas
ni los orínes flojos y escasos
has de querer vanidad de una mozuela
has de anhelar la senectud a tus treinta
para no morir bizarro.
 
Este grito que tu voz desboca
legítimo bosquejo de ropa
para adornar tu cuerpo fino
para traer multitud hincada a tu boca
porque eres un tormento varado en la prudencia.
 
Baluarte de encrucijadas
único de paradojas, las extenuantes
las del partido suspendido y corriente
auténtico tiempo es el tiempo de tu resguardo
llamale flajelo al amor errado
nombra criminal al gusano tímido
que no hará más que presumir su posesión  de tierra
su míseria.
 
Contra el ballet
completo
por hacerte uno
el altivo escénico
la múltiple plegaria de afán por lo mismo que maquillas
contra la penitencia de encontrarte sin quererlo
tuerce a la impura con tu jerga en la mano
para que escurra la perra que te encogía
la del desierto grotesco
que no te dió más que besos en rebaño
pero ninguna caricia al cerebro.
 
Carga lucidez y navega...
con la caída serás moderno
con la camisa el infierno
de tu raza querrán ser los pálidos
los hambrientos de invierno
el espectro que sólo toma vino para estar morado.
 
Tu devenir no es ser Esposo
ni vértigo, ni inexpresable asombro
es ser un verbo
para que todos te hagan posible
para perpetuarte en la palabra
en la eternidad humana de sus épocas
 
! Oh rey de los horizontes más globales!
lava la cultura temible y moralista
nada de arte para las aristas
muérdele la sapiencia al metafórico paisaje
y escúpele la noche al día
para darle un cirio funerario e hipócrita
y búrlate después de él
trayendo un féretro hecho de tus dientes
que al fin, para entonces, ya estará ausente...
 
! Viuda la noche !
 
Pero tu apoteosis , tu existencia
la unica no evadida
ya  es resultante maldita.
 
Yo he de pedir  el meditterráneo de tus entrañas
el charco de tu saliva
para recuperar la buena invensión.
 
Quiero sabiduría de huérfano
para adoptarte el destino
que entre la facultad de besarme o evadirme está tu existencia.
 
Que te recorre la pena, lo mismito que un ciclón
como espiral es tu llanto
como carrusel tu panteón
el hambre de ser alondra
en la panza de tu resueno
no ha de quitarte la pena
ni siquiera el lamento
eres más que un niño sin mama
viviendo sin la lactosa
que si de fortuna se trata
tratarás de la ausencia en prosa.
 
Otro amor será
niño que quiera la muerte
otro yo seré
rezando porque no llegue.

  • Autor: Eduardo Urueta (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 13 de mayo de 2011 a las 00:54
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 128
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Comentarios2

  • Leonardo Arzate

    vaya
    impactante lo dicho

    • Eduardo Urueta

      Gracias Leonardo. Un abrazo. ^^

    • poeta777

      impresionante poema muy profundo!! saludos!!!

      • Eduardo Urueta

        Gracias. Ahí es donde quiero quedarme.
        Un abrazo.



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