Hoy, pequeña, has llegado a mí
Envuelta en llanto y alegría,
Te miro con atención, y veo que
Te pareces a mí en cuerpo y alma.
Con tus pequeñas manitas
Te aferras a mí con gran fuerza.
Jamás había sentido tanto amor
Y cariño por una mujer.
Tu nombre será el más simple
Y el más hermoso que existe.
Cada palabra, cada caricia,
Cada vez que me digas papá
Será un aleluya para mí.
Por último, hija mía, bienvenida al mundo,
Te aseguro que jamás te aburrirás de vivir aquí.
Se feliz y ama con el corazón,
Se lo que lo que tú quieras, pero se tu misma,
Porque tu eres lo más hermoso que tengo.
© Antonio Quesada Espinoza. Todos los derechos reservados
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Autor:
Cuervo Negro (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 25 de julio de 2009 a las 21:27
- Comentario del autor sobre el poema: bueno, éste poema, no va dedicado a nadie.... todavía. Yo quiero tener una hija...a la cual le dedicaré éste poema y todo mi amor.... pero por el momento no.... tal vez dentro de 20 años jeje
- Categoría: Familia
- Lecturas: 1005
- Usuario favorito de este poema: el_que_no_esta.
Offline)
Comentarios3
Es bello pensar que un día tendras una hija a quien dedicarle este bello poema.
Saludos y que estes muy bien
Hasta pronto
Bello, simplemente bello, el tener un hijo es una bendicion de Dios, espero te llegue algundia, sino es que ya la tengas......
Tu amiga Carmen
lindo amigo, de eso escribi hoy... te invito a leerme... dulce y tierno tu poema y con amor para tu hija
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