Jean Giraudoux

La pequeña comuna francesa de Bellac, en la región de Limousin, vio nacer el 29 de octubre de 1882 a Hippolyte Jean Giraudoux, quien con los años se convirtió en un destacado novelista, cuentista, ensayista y dramaturgo.

Hijo de Léger Giraudoux, quien trabajaba para el Ministerio de Transporte, Jean Giraudoux también fue empleado del Estado francés, en su caso desempeñándose en el Ministerio de Asuntos Exteriores. Antes de comenzar su carrera diplomática, estudió en el Lycée Lakanal y recorrió el continente europeo, visitando Alemania, Bélgica, Italia y otros países.

Giraudoux volvió a Francia en 1910 y se sumó al mencionado ministerio. Con el estallido de la Primera Guerra Mundial, fue convocado por las fuerzas armadas: su desempeño en combate le valió el reconocimiento como integrante de la Legión de Honor.

La mayor parte de su producción literaria la desarrolló en el periodo de entreguerras, aunque ya había comenzado a publicar en 1909, cuando presentó “Provinciales”. La novela “Siegfried et le Limousin”, aparecida en 1922, se convirtió en su primer éxito y le valió un amplio reconocimiento. Seis años después, de hecho, Giraudoux adaptó el libro al teatro en una obra titulada simplemente “Siegfried”.

“Choix des élues”, “Églantine”, “Pleins pouvoirs”, “Combat avec l’ange” y “Sans pouvoirs” son otros de sus principales trabajos en novela, ensayo y cuento. En cuanto a su rol como dramaturgo, lo desarrolló a partir de 1928 con obras como “La guerre de Troie n’aura pas lieu”, “Ondine”, “Électre”, “La Folle de Chaillot” y “Sodome et Gomorrhe”.

Giraudoux alcanzó la fama mundial a través del teatro, con varias de sus obras traducidas al español: “No habrá guerra en Troya”, “La loca de Chaillot”, “Electra”, “Ondina” y otras.

De intensa vida sentimental, Jean Giraudoux vivió en Alemania, Turquía y otros países por su labor diplomática. El 31 de enero de 1944, en París, se produjo su fallecimiento a causa del síndrome urémico. Sus restos reposan en el Cementerio de Passy.