www.Poemas-del-Alma.com
Gonzalo Osses – Vilches
Epitafio
El dÃa que me mate,
los trenes llevarán minutos de retraso,
el tiempo justo para recoger mi cuerpo de las vÃas.
Y la ciudad se abrirá, desvencijada y pujante,
sobre la olvidad trocha de sus tranvÃas.
No sé qué rumor acunó mi amor por sus veredas,
pero es como si fuera ayer que mi viejo la narró tal como era.
Me gustarÃa saber que se dijera: aquà nació, vivió y murió.
Fue parte de la felicidad, fue infinito de alegrÃas,
no tuvo miedo de saber y de saberlo jamás lo aprendió;
ni por un segundo dijo atrás siquiera para no retroceder.
Sólo unas pocas palabras para despedir lo hecho.
estas simples reflexiones serán suficientes para la soledad de mi ego.
Y después...
una agonÃa de hoy en adelante.
Y al final...
una caricia al sol que nunca dejará de ponerse.