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Luis de Góngora
¡Oh qué malquisto con Esgueva quedo
¡Oh qué malquisto con Esgueva quedo,
Con su agua turbia y con su verde puente!
Miedo le tengo: hallará la gente
En mis calzas los tÃtulos del miedo.
¿Quiere ser rÃo? Yo se lo concedo;
Corra, que necesaria es su corriente,
Con orden y ruido, el que consiente
Antonio en su reglilla de ordo pedo.
Camine ya con estos pliegos mÃos
Peón particular, quitado el parte,
Y ejecute en mis versos sus enojos;
Que le confesaré de cualquier arte
Que, como el más notable de los rÃos,
Tiene llenos los márgenes de ojos.