Un verde sonido,
estentóreo como una soledad.
Un verde molusco,
terso de lodo,
mugriento de nácar.
Un verde sonido.
Unas manos amarillas.
Un ánima enmohecida.
Un vaho de tierra,
penetra tu cuerpo,
penetra tu fuego,
te convierte en milenio;
te convierte en incesante.
Un verde sonido.
Un triste geranio.
Un delirante jacinto.
Un húsar de cristal
llora un verde sonido,
sobre sementeras,
sobre espinetas,
sobre piltrafas,
sobre escobas de guirnaldas.
Un verde sonido,
apagado por el pasto.
El verde sonido
del diezmo y del ocaso.
- Autor: Joaquín Adduci ( Offline)
- Publicado: 8 de octubre de 2021 a las 04:14
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 43
- Usuario favorito de este poema: Classman.
Comentarios1
Interesante poema¡¡¡ gracias por ser tan creativo¡
Gracias a vos por ser.. eso es lo más importante que tenemos, el ser. Ser uno mismo, ser, simplemente.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.