“Una semana más para reunir todo el amor del tiempo. Para dártelo. Para que hagas con él lo que quieras: guardarlo, acariciarlo, tirarlo a la basura.” – Jaime Sabines
Ahí da su aldaba pirotecnia y megáfonos. Molde inimitable, milimétrico y galvánico.
Ah, ida mis piernas en periplo de una arruga de bache de Barbeytia y su arteria.
Tobillos y engranaje olor marbete con sabor acúñame. Los llamaste a polarizar.
Elipses cárdenas, volcanes dóricos y abejas vitrificaban mis heráldicas pupilas y orejas.
De soslayo, incisivo e ignífugo tu parteluz y sonido a mi purpúreo parterre y su blindaje.
Broca ecuménica latente.
Seductor reguero de mis dedos afásicos y mis agnósicas lenguas.
Tierra y límites mordisqueaban el perfume del celofán y estalactitas, sucedáneo inoculado en mis nubes por tus uñas.
¿Sinceridad en el coliseo?
Claro está que sin recorrer las cortinas ahí estaba yo con la bifásica silueta y antifaz isómero.
Pero estaba.
(El rapto de Europa)
Lo que flota en el mar es:
Un sarcástico martillo originario de Urano.
Un pícaro reloj de arena fundido en tu talle.
Un binomio de élitros sobre el alféizar de tu ironía y humor.
Un día de ruido. Una prímula de espejos. Una gama de sogas.
Una litografía por cada zafiro en tus plexos, párpados y cuello.
Una mirada de peldaños que rueda por las paredes y pinceles del castillo.
Un balde lleno de pavimentos y presagios. Todos con sus hilos auxilios a tus fraguas.
Un armamento decidido y violento en forma de baldosas donde camina tu holística belleza.
Tu pelo flotando como el humo por la ventana del coche.
Tenía ya un bunker en cada hora, en cada brazo y obelisco para tu brontofobia.
Monumentos de rescoldos. Cuchillo afilado de pacto.
(Soleve mi tono opaco tu tinta y núcleo).
¿Un perdón por cada girasol en la Toscana, Italia?
¿Un perdón por cada confianza y jarrón roto de Los Girasoles de Van Gogh?
¿Un perdón por cada girasol ciego y por cada honestidad eclipsada?
Cada mes es mayo
Tengo muletas hechas de tus besos
Paraguas de canciones
Acuarelas para las burlas y bromas
Semillas de simbiosis
Noches de ópalo
Días sin parabrisas
Manos de baños de espuma
Una ciudad de sillas para esperarte
- Autor: Onofre Tercero (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 21 de mayo de 2018 a las 15:08
- Comentario del autor sobre el poema: "En estos momentos me gustaría que mi carro fuera automático"
- Categoría: Surrealista
- Lecturas: 51
- Usuario favorito de este poema: Amaneceres Abruptos.
Comentarios5
Como siempre, nos ofreces un ramillete de versos,
especiales, hermosos y llenos de ti.
Gracias por tu poesía, mi querido,
Amalia
Espléndidos versos cargados de bella expresión , se nota tu estilo tu mágica forma de trasmitir. Maravillosas letras . La he disfrutado enormemente . Felicitaciones poeta. Un saludo cálido y abrazos entrañables . Cariños con aprecio y besos .
apoko zí irelo
Me ha gustado. Interesantes imágenes.
¡Magnifico! Tus versos son una obra de arte. Me encantaron tus versos y admire con detalle cada palabra. Un saludo y sigue así que tienes talento.
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