La triste vida

qolorao

Aquí estoy y no estaré,

y el tiempo pasará,

y las noches se harán cortas,

así como el ocaso

teñirá los verdes campos

y el estío se hará invierno

por otoño y primavera.

 

Recorrerán unos tantos

caminos y veredas,

tornará en buena o mala

la triste vida

y la gente pisará las calles,

tiempos peores vendrán

y no habrá ya quien los pare.

 

Y el tiempo volará,

y yo me habré ido,

y el estío se hará invierno

sin ningún impedimento.

 

Soledad y muerte,

dolorido, perecedero.

Ando solo y cansado,

medio vivo, medio muerto.

  • Autor: qolo (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 30 de junio de 2016 a las 12:35
  • Categoría: Triste
  • Lecturas: 54
  • Usuario favorito de este poema: Mauro Enrique Lopez Z..
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Comentarios1

  • John morales

    A eso llamamos vida; tal fría y real, a veces parece muerte porque la muerte es parte de la vida misma, la soledad fluye como aceite fúnebre por el alma...

    te dejo este poema de un gran poeta del siglo XX, haber si hayas respuesta:




    Estáis muertos.

    Qué extraña manera de estarse muertos. Quienquiera diría no lo estáis. Pero, en verdad, estáis muertos, muertos.

    Flotáis nadamente detrás de aquesa membrana que, péndula del zenit al nadir, viene y va de crepúsculo a crepúsculo, vibrando ante la sonora caja de una herida que a vosotros no os duele. Os digo, pues, que la vida está en el espejo, y que vosotros sois el original, la muerte.

    Mientras la onda va, mientras la onda viene, cuán impunemente se está uno muerto. Sólo cuando las aguas se quebrantan en los bordes enfrentados y se doblan y doblan, entonces os transfiguráis y creyendo morir, percibís la sexta cuerda que ya no es vuestra.

    Estáis muertos, no habiendo antes vivido jamás. Quienquiera diría que, no siendo ahora, en otro tiempo fuisteis. Pero, en verdad, vosotros sois los cadáveres de una vida que nunca fue. Triste destino el no haber sido sino muertos siempre. El ser hoja seca sin haber sido verde jamás. Orfandad de orfandades.

    Y sinembargo, los muertos no son, no pueden ser cadáveres de una vida que todavía no han vivido. Ellos murieron siempre de vida.

    Estáis muertos.


    • qolorao

      Gran poema. Gracias por compartirlo, da qué pensar



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