luis andres

encantador de serpientes

Encantador de serpientes

Que ante suave luz no tiene sombra

Mientes forzando a creerte

Hablas corrigiendo el eco.

Entre engaño morboso

Se forja tu pensamiento

Y entre relicarios tu sonrisa

Pero ante la luz no tienes sombra

Y te resiente el saberlo.

Caída tu gracia te vez miserable

Aunque mis ojos no puedan verte

Y mi voz acariciarte

Sé que como serpiente

Al asecho de mi alma estas

Encantador de débiles y fuerte

Ante la luz tu cuerpo no da sombra.

Con el paso del tiempo

La miel de tus trampas

Se convierte en podredumbre

Que pobre eres en tierra de riquezas

El hambre carcomería tus entrañas

Si la felicidad fuese dos manzanas.

Encantador de serpientes

Ante la luz tú no das sombra

Aunque la comprares o la robaras

Tropezarías con hilos de caricias

Caricias envueltas en luz omnipotente.