marco augusto

La tumba del olvido

Desde lo oscuro de mi ser nace mi voz

y empieza su camino escabroso

con las murallas de muerte al frente,

pulsando entre la oscuridad

buscando refugio para mi cuerpo

y mi boca sedienta de pasiones,

las memorias de añejos amores

son duros maltratos para mi corazón huérfano,

con el café amargo que me da el destino  

que voy bebiendo sorbo a sorbo

mientras me enjuicia la vida,

la voz se me pierde entre tumulto del desaliento,

entre la lluvia pertinaz de mis fríos días

mis pies cansados, mis huesos vacíos,

el amor en ayuno,

con mi lengua seca sin el sabor de un dulce beso,

busco sin miedo el descanso eterno

dentro de la tumba honda del olvido.