Jose Luis Santiago

EL OCEANO TEMPESTUOSO DEL SECTARISMO

 

 

Sin timón, sin velas y sin remeros

navego en el océano enfurecido

y agarrado con fe a dos maderos

a la esperanza quedo sometido

flotando en el mar embravecido

 

las crestas de sus olas tenebrosas

con espumas todas ellas coronadas

me mecen y pareciendo generosas

me ofrecen sus efímeras alzadas

voluptuosas, orgullosas y obcecadas

 

con sinceridad aguanto la tormenta

sus vientos y sus fuertes oleajes

y velando mi alma bien se ausenta

de la tempestad y su oscuro equipaje

que pretende que mi fe se resquebraje

 

mas de cerca que de lejos

esta la luz que disipa las dudas

el interno y divino consejo

que en las apariencias no se escuda

y a obrar con conciencia bien te ayuda

 

sus actos bien los definen

sus palabras bien los delatan

y por muy alto que ellos trinen

la cruda realidad los desbarata

igual que la calma a la tormenta la mata

 

si la ley de Dios la acatas

del sectarismo te despojas

y actuando de forma sensata

la cuerda que te ataba se afloja

y el único Dios con su amor te aloja