cbastias

Cementerio de juguetes

 

Expresión de tus labios,

brío socalado de tu seno en lactancia.

 

Madre, rumor de miel en la voz de un niño;

solado de cumbres y arrecifes de tu piel tierna de caricia

que en los joviales pañuelos de los rizos de plata

duermen los cantos del último latido.

 

La niña ve en las nubes sureñas, la procacidad de un cuervo

revoloteando la espigada frente de la ventana.

La muerte, siente el llanto del cielo, trae consigo

el corrosivo liquido de aires contaminados

el crespón se viste de gala airoso en su victoria

mientra la niña de ojos huérfanos

musitaba en los jadeantes rizos de plata

¡No te mueras mamita!