FELINA

LAS VOCES DEL OLVIDO

 

Como los negros océanos
de tus enlutados sueños,
se pinceló la primavera
de las ilusiones mías...
Ni un sólo destello
de luz quedó en mi alma,
para alumbrar mi precaria vida.
Ya no he de buscarte
por los recodos del camino,
mis huellas sangraron
al conocer tu olvido.
Sólo un viento gélido
penetró el abismo
en donde se refugiaron
los sentimientos míos.
Por eso hoy en mis andanzas
¡No te busco!
Mis pasos se dirigen hacía otros lados,
tu recuerdo quedó anclado en lontananza,
en donde ni siquiera logro divisarte.
¡Yo te ofrecí mi amor
¡Tú no me amaste!
ni siquiera permitiste que te hallara,
ya muy claro me quedó
que tengo que olvidarte,
sé que jamás he de encontrarte.
No pude nunca mirar tus ojos negros,
ni esos labios, con los habrías de besarme.
Tendré que vivir con el hielo agazapado
filtrándose por las fisuras de mi alma.
¡Ya no...! Ya no vendrás nunca, para amarme,
ni a entibiarme con tus cálidas caricias,
bien lo sé...me lo dice a gritos el silencio
que retumba con las voces de tu olvido.
Felina