GITANA DULCE

AMAR PARTE II

Los amantes que querian continuar en su juego

su juego de amar, comenzaron con su besos

en los que sus lenguas se pasaron por sus labios

besandolos suavemente... lamiendose...

metiendose la lengua para urgar en la otra boca.

Mirandose fijamene a los ojos como queriendo ver

ellos cuales son lo sentimientos del otro,

pero al verse, sus miradas estaban

encendidas de pasión...

Comenzaron con el juego de los besos sensules

recorriendo su cuellos extendido esperando esa caricia

subiendo a la oreja, entre lamidas y mordisquillos

besandolas y acariciándolas.

Sus manos aprisionaron una a cada uno de sus

prominentes pechos,

administrandoles unos suaves masajes, con lamidas

en su auroeola con los pezones como tuercas

de duras esperando su succión,

y entre lamidas y pellizcos, ella gemía suavemente.

Bajando sus manos sin dejar de besarla

llego hasta su sexo, hundiendo sus dedos

buscando en el manoseo su grito de placer,

buscando con su boca el portal de la gloria.

Sus dedos salieron para dar paso a sus dientes

quienes suvemente mordisqueaban y su lengua...

buscando tiernamente la delicad puerta de su agonia...

y fue cuando se dio cuenta que su amada, entre caricia

y caricias habia encontrado en un amague...

Con sus manos ella frotaba, acariciaba...

su miembro duro llevandoselo a la boca,

y comenzado el acto de succionar.

un gemido de placer, de su boca le salio.

Mas el su tarea continuo, a pesar de sentir

que ella con su boca le hacia sentir un gran deseo

es mas, se oian sus corazones latir,

con demasiado nerviosismo por el momento en cuestión.

En cada succión que ella le realizaba

lamia y sostenia entre sus manos su testiculos

ella mientras se estremecía y arremetia

con su boca en su parte sexual erecta y calurosa.

La amante enviando un grito entre cortado

por no querer sacar de su boca el dulce caramelo

sin poder reprimir su orgasmo, justo cuando el climax,

llego a ambos y el eliminando su jugo en una explosión

que ella esperaba gimiendo de placer...

se rindieron a la pasión... y luego se abrazaron

y besaron apasionadamente, para exaustos dormir abrazados.