BrisaMariana

Poema de la desempleada triste ( o cuando el trabajo se acaba)

Como el día cierra su turno con la caida majestuosa del sol

dando paso a la noche y su luna de espléndido fulgor

así termina este ciclo que tanto tiempo duró

y que hoy sus puertas cierra, para dar paso a otro color.

 

Se termina este convento de letras y vagos números

que alimentaron el futuro que a cada paso construyo

que me hicieron grande y fuerte con cada luna creciente

mientras mis logros crecían con cada tríunfo y alegria.

 

Se términa el tiempo de ser una empleada

triste es la manera de cerrar esta jornada

se acabó el pequeño imperio para el que trabajara

quebró en esta crísis que a tantos fulminara.

 

No queda más que seguir el camino

que hace varios meses aquí comenzara

de nuevo me encuentro, bien desempleada

a buscar trabajo, una nueva esperanza.