Gustavo Leni

SEÑALES

Despacio.

El mundo gira lentamente a toda velocidad.

Lento.

A prisa se desvanecen los minutos, las horas,

el tiempo de la humanidad.

 

Al hombre no le bastan

los colores del arco iris.

Necesita colores sintéticos.

 

En el umbral de la vida

el hombre comienza a construir

el lugar destinado al encuentro con la muerte;

la tierra observa en silencio

y no comprende

no comprende al hombre.

 

La madre natura entrega sus señales

pero el hombre prefiere ver televisión.

 

El cielo llora lágrimas ácidas, negras

o turbias en sangre;

se rompe el velo,

entra el cáncer en el aire,

en la tierra, en los ríos,

en las manzanas, en los tomates;

en las mariposas.

Cae la vida del hombre

lentamente

entre sus propias manos,

mientras el signo monetario mundial

se ríe del hombre

desde su bolsillo.