juda saulo

No te veo

Amor ya no te veo, estoy ciego de tus ojos

De la inmensidad que orbitaban como las segadora de las almas

que no hacía más, que llamarme a tu boca,

de esa ingrata estela que me decías que era la eternidad,

que con las moscas me enseñabas,

no hay más que la disidencia de tu adiós,

de la constancia de tu falta y los insoportable de tu  fragor,

que ahora no está y es más aun, es determinante para ver que estoy solo.

 

No estarás, no estuviste, más que en los ojos que dan testimonio de ti,

de que estabas, puliendo huesos, y digiriendo besos,

como el fuego con el que hablabas para abrir camino hacia la incertidumbre,

pero que todo en esto se consumía con las huestes de la ignorancia amorosa.

 

De lo perpetuo de los días que eran para uno ,

en mis manos que gemían, para decirme que no vivirían mucho,

que no sabrán de la conciencia de sus creadores,

de los efímero que es la certidumbre y los mohoso que se vuelve el sosiego,

amor ya no estás pero por último creo que te escondes, en las luces de mi mente,

con todo el abismo que traga almas y escupe niños no nacidos,

en esta insipiencia tu estas clamando a que te saque,

para que no vuelvas a ver la mortandad pero ella ya te ha visto,

y no cree que seas un triunfo seguro, mis luces,

en toda esta obscuridad se encargaran de sacarte a flote en los días con sabor a sal.