Carlos R. Barrera

El Ser majestuoso...

El frío manto de tristeza me cobija,

en las noches largas de invierno,

tu recuerdo, a mi mente cautiva,

como un todo, dueña de mi trono.

 

El deseo vuelve loco apasionado,

e intenta surgir entre el destino,

como un torrente por el tiempo pausado,

se detiene, pero muestra su camino.

 

Es voraz la indecencia de mis sueños,

cual sádica función del Marques,

y aún lejana la idea de ser tu dueño,

 

 

Pues eres belleza y perfección tan pura, 

que no lo creo, ni siquiera imaginable,

el Ser majestuoso, que descansa en tu ternura...

 

 

 

                                                      Carlos R. Barrera