reivaj-01

Sucede

Sucede que te busco entre la sal,

bajo mis pestañas

en la oscuridad del mar,

que bordea mis ojos.

 

Y vuelvo a buscarte entre mis dedos

que jugaban con los tuyos,

e imagino tus manos pequeñas

cubiertas por un milagro de rocío que nieva.

 

Tal vez me he perdido

tratando de hallarte

o he muerto cuando terminó el verano

en nuestras vidas, quedando el otoño.

 

Sucede que utilizaste el olvido

que esconde el orgullo

y me has olvidado

a la velocidad de un suspiro.

 

Me borraré las manos para ti

silenciaré los latidos de mi corazón,

y mi razón volará al futuro

en el próximo minuto.

 

Pronto dejaré de buscarte

y créeme que no serás ni recuerdo,

y no habrá quien te escriba

ni un solo verso.