Con loca alegría,
te sigo queriendo
y me estoy muriendo
porque seas mía;
cuando yo contemplo
tus ojos radiantes,
aquellos diamantes
que me iluminaron,
se acelera mi pecho
y al llegar la noche
tan triste y solito
te sueño en mi lecho;
y al despertarme
me encuentro llorando,
y en soledad gimiendo,
porque te estoy amando.
Si tu comprendieras
el inmenso cariño
que en mi pecho he guardado,
cuando este a tu lado
me mimarás cual niño,
pero solo encuentro
tu cruel rechazo
que hiere mi pecho
y le hace pedazos.
Esperaré paciente
la dicha anhelada
y aquella mirada
de fuego caliente;
que las venas reviente
de loco deseo,
pero en tus ojos veo
que por mi nada sientes,
y por eso, agoniza
mi alma amante
en su lucha constante
por estar a tu lado;
porque siento en mis locos delirios
que de tus labios un beso
y nada más que eso,
calmará mi martirio.
Tus labios entornados
parecen roja manzana
que alimenta las ganas
de aquel beso negado,
por el que tanto he rogado,
cual mendigo hambriento
hasta quedar sin aliento
sin haberlo logrado
Pero haré que me ames,
para estar en tu sueño,
y me convertiré en tu dueño
cuando en tus delirios me llames.
Solo día a día
me dices siempre nunca,
dejando mi vida trunca
y mis manos vacía…,
no se cuanto daría
porque llegue aquel momento,
de sentirme contento,
y lleno de alegría
el corazón por dentro.
Cuando sea nuestro encuentro
en un lugar solitario….
Y un poco más después
suene el campanario
anunciando la unión
de dos almas amantes;
y no será como antes
al escuchar una canción;
que no llegaba a tu pensamiento,
porque le hallarás sentimiento
y un poco de ilusión.
¡He esperado!... semanas enteras
con sus horas agoreras
solitario en mis tormentos,
guardando los sentimientos
que por ti han nacido,
aquel noble pensamiento
de mi cabeza distraída;
y siempre te encuentro de ida
sin nunca haber venido…,
y por ti mis latidos
mantienen con vida
a mi alma soñadora,
que a ti te adora
musa, diosa y mujer
que solo por tu querer
esperaré hasta la última hora…
Aunque salga la aurora
volverá a luchar
segundo, minuto y hora
porque me llegues amar.
¡Más juro por mi …!, Corazón;
luchar por tu querer
aunque llegue a perder
de mi vida la razón.
Y venceré tu orgullo
a mis ansias y caprichos,
y recordaras los dichos,
cuando seas mías…., y yo tuyo!...