En mi Fantasía interna, un libro siempre abierto,
como mi alma, llena de mundos, por cierto.
Soy como Bastian, soñadora y diferente,
en las páginas encuentro un refugio ferviente.
Soy Atreyu, valiente, leal a mí misma,
en mi rareza encuentro mi propia brisa.
La Nada acecha, vacía y sin color,
pero prefiero ser yo, con todo mi fulgor.
Soy la Emperatriz Infantil, pura y sabia,
mi esencia única es mi mayor valía.
Quien critique mi brillo singular,
no comprende el tesoro que puedo dar.
Recuerdo las palabras que ayer me dije,
mi rareza es un don, un jardín que elige.
Riego mis sueños, cultivo mi ser,
y en este viaje sin fin, ¡soy quien quiero ser!
Y como la Historia Sin Fin que nunca acaba,
mi vida es un cuento que mi alma alaba.
Así que sonrío, sueño y creo sin temor,
¡mi rareza es la magia, mi propio color!
Prefiero ser así, con mis colores vibrantes,
que perderme en la Nada, en instantes.
Mi rareza es mi escudo, mi grito de libertad,
¡una vida llena de autenticidad!