DIVAGANDO.
Eres como el sueño, llegas sutilmente,
como sutil el viento, nos llega sin aviso,
tan volátil, como el pensar de la mente,
que sin pensarte… llega de improviso.
Eres como el beso, ese que se da,
voluntaria o involuntariamente,
estampado fraterno en la frente
o al amor que nos llega o se va.
Eres como el ansia que subsiste,
que acompaña fiel y se nos queda,
ansia que arraigamos, feliz o triste
y duerme con nosotros o nos desvela.
Pero también eres como el amor,
que tanto acaricia o castiga
y que hace tan apetecido el dolor,
cual hambre que no sacia una miga.
Y eres como eres, talvez como no sé,
pero sé que eres, lo que no preciso,
lo que tanto amo o lo que tanto amé.
Autor: Víctor A. Arana,
(VÍCTOR SANTA ROSA.)
Guatemala, diciembre 28 del 2025.