Sebastian Mena

En segunda persona

Cuando te busques,

hazlo con mis ojos;

no porque sean lindos,

si hasta se presumen

borrosos.

 

Pero búscate en mis ojos

y verás el reflejo del alma mía

estando contigo,

y la tuya

al ver que me faltas.

 

Podrás ver tus faros verdes

iluminando la noche oscura;

podrás ver tu sonrisa

grabada

en los archivos de mi memoria.

 

Me gustaría poder prestarte

alguno de mis sentidos:

que puedas escuchar tu voz

y cómo es que calma mis ansias,

o percibir lo ambivalente

de tu perfume en mi pecho,

que me acerca a tu abrazo

y me lleva a tu ausencia.

 

También lo rico de besar tus labios,

o la magia de tus caricias,

que muchas veces me encienden

y otras tantas me sanan.

 

Te los presto

para que no haya dudas,

para que lo efímero quede lejos,

para que veas que solo hay una

que merece un te quiero,

un te amo,

un espero verte de nuevo

hoy, mañana

y todos los días

que aún nos faltan.