Amor de mascotas
Hallamos en casa el cariño fiel
de animales que, aunque mudos,
demuestran dignidad, sean peludos;
alados, escamosos, de una piel.
Pero más allá de esa piel, de aquel
animal surge el amor, como nudos
de ideales: confianza, calma, agudos
gozos de confianza muda. Así, él,
Ella o ellos nos confían al humano
devolverles el amor en cuidados
que para el ánima, no será en vano.
Plenos, seguros, nos miran gustados
dejándose mimar por una mano.
No hay mayores cariños exclamados.