Un millar de luces encienden la noche buena,
se escuchan coros de villancicos en la lejanía,
hay un aroma a incienso y palo santo…
que inunda el ambiente…y anuncia la buena nueva.
La tradición está vigente…
y se estremece el escenario como siempre,
la gente camina con prisa,
van y vienen cruzándose de uno a otro lado,
todos apurados.
Agita la brisa las persianas,
se cuelga el crepúsculo del horizonte,
en la distancia se desvanece el sol…
dando paso a una presumida luna plateada.
Una emoción delicada se manifiesta,
el paisaje se pinta de un brillante oscurecido,
hay una algarabía difícil de describir,
una bulla que suena a murmullo…
sin dejarse descifrar con claridad,
una dulce sensación a renovación…
como un buen augurio de amor y de amistad.
Hoy es navidad,
se renueva la fe en la fraternidad,
es el nacer de otro amanecer,
un distinto clarear,
otra oportunidad para empezar…en un abrazo de sinceridad,
un beso de noble sentimiento…sin el velo de la falsedad.
Después de tanto tiempo de adversidad…
de haber sorteado la desolación,
de batallar en contra de la desesperanza,
hoy llega navidad…
con la seguridad de que todo cambiará.
Tú, que como yo hemos tenido que resistir…
la frialdad de la decepción,
tu igual que yo…
no permitimos que nos roben la ilusión…
y logramos superar la angustia,
tu y yo nos merecemos un destino mejor…
en donde se restaure la pasión por creer.
Que el espíritu de la navidad te traiga como regalo…
paz y prosperidad.