- No puede entrar
me dice Tati al señalar a Luna.
- Hay que vacunarla,
si no se vacuna
no puede entrar.
sostiene.
- Igual ella me quiere,
me quiere un montón.
¿No es cierto, Luna,
que vos me queres?
* Luna maúlla.
- ¿Viste tío?
Te dije que me quería.
Tati sostiene que Luna le responde.
- Luna, ¿no te parece que ya es hora
para que Tati se vaya a dormir?
Le pregunté.
* Luna maúlla.
Tati reprocha:
- Luna no tiene reloj.
- No necesita reloj,
todos los animales
siempre saben qué hora es,
¿No es cierto, Luna?
* Luna maúlla.
Tati rezonga, frunce el ceño,
mira fijo a Luna, gira levemente la cabeza.
- Está bien Luna, está bien,
pero quedate hasta que me duerma.
Tati se hace bollito a mi lado.
- ¿Tío, me lees otro
de los cuentos de Julito?
Entonces cierra los ojos
y sonríe por última vez.