marco romero

Voluntad de Sangre

Te amo cuando tus ojos se abren como labios mudos, porque no miran:  laten. 

 

Tu mirada es un lenguaje de astros descendidos, un rumor de verdades que sube, como una marea ciega, desde el centro absoluto de tu sangre, ahí el corazón no solo se agita sino que arde.

 

Te amo 

No de repente. No por azar.

 

Y Te elijo.

 Día tras día contra el tiempo y a pesar de todo te elijo.



m.c.d.r