Valparaíso son dos palabras
una que habla de romances
y la otra de pobreza.
Palabras que arrastran sedimentos
historias, angustias y desvelos
subidas y bajadas serpenteantes.
Un enrejado de calles y cauces de lluvias
que miran hacia al mar y hacia el cielo
instrumentos que interpretan la música del cosmos.
Vibran en la ciudad las cuerdas ligeras
en dimensiones que nunca se ven
replican aquello que no alcanzamos a entender.
De un grano de sal a un latido interior
todo es música de cuerdas todo es río
que fluye entre la mente y su rumor.
Una luz que se pierde en el horizonte
una lágrima que no entiende su porqué
ambas como parte del mismo organismo.
Valparaíso son tres palabras
el amor, la memoria y el deseo
voces que danzan en una misma frecuencia.
Todo vibra en esas mil palabras
una esperanza, una emoción, un gesto
no hay separación.