La personalidad es la esencia del cuerpo,
el alma que viste de gracia al ser humano.
Es la huella que permanece
en la vida de quienes lo rodean.
No es el cuerpo,
no es el físico
lo que realmente marca vidas.
Son solo simples envoltorios
que muchas veces recubren un alma, una esencia,
que lucha por sacar a relucir
esa personalidad despampanante,
capaz de cautivar
a quienes sepan apreciarla,
sea dulce o fuerte.
La personalidad es el motor,
es el centro de la vida.
Déjate llevar por ella,
permite que mueva
el eje de tu existencia.