mauro marte

OS RUEGO

    

Respóndeme, tú, hilador de versos.

Contéstame, tú, tejedor de poemas.

¿Cuáles palabras puede apagar este

fuego en el alma y cuyo dolor arde

sin   quemarse?

 

Dime hechicera del verbo.

Háblame, idolatra de la metáfora.

¿A cuál oráculo debo de ir, a buscar

   el destino final de esta agonía?

 

Acaso, una palabra tuya.

Acaso, un verso tuyo

podrá atrapar tanta soledad.

 

Os ruego, os pido

enviarme una elegía,

donde pueda ver lo que he perdido

o un psalmo de esperanza

o un ensalmo contra la soledad.

 

Tú, Tú, Ustedes, Vosotros

que van tejiendo como paños de

crochet, poemas en el alba

vates de la noche, cuyas palabras

se pierden al amanecer.

 

No podéis dar un verso, un ungüento

para este dolor, para este adiós de sí mismo.

 

Si no podéis exorcizar mis demonios

déjame en paz,

déjame en paz

os ruego

os pido.