Antonio Portillo

El que permanece

 

Hubo un tiempo
en que fui prisa,
miedo con argumentos,
nombre defendido a golpes de razón.
Creí que era mis errores,
mis certezas heredadas,
las culpas que aprendí a cargar
para no desobedecer.
Fui lo que se espera,
lo que encaja,
lo que se repite
por miedo a quedarse solo.
Pero algo empezó a caer
sin hacer ruido:
las máscaras útiles,
las verdades prestadas,
las batallas que no eran mías.
Dejé de ser
quien necesitaba explicarse,
quien pedía permiso para sentir,
quien confundía sobrevivir
con vivir.
Ahora no soy llegada ni meta.
Soy paso consciente.
No tengo respuestas cerradas
ni preguntas urgentes.
Soy quien escucha antes de juzgar,
quien duda sin despreciarse,
quien camina ligero
porque ya no arrastra personajes.
No soy lo que perdí
ni lo que gané.
Soy lo que queda
cuando cae el ruido.
Y si al leer esto
alguien se reconoce,
no es porque seamos iguales,
sino porque la verdad no tiene dueño 

 

Antonio Portillo Spinola