NAVIDAD RESISTENTE
Celebramos igual: la guerra ruge,
pero una vela insiste en no morir;
el mundo se desangra y hasta cruje,
aun así, nace el pan para existir.
La crisis muerde puertas y salarios,
la mesa es breve, el vino es convivir;
sin embargo, brindamos, temerarios,
por lo que aún se niega a sucumbir.
La pérdida se sienta entre los platos,
pronuncia nombres con voz de carbón;
más al cantar desarmamos los datos,
y el miedo pierde ritmo y dirección.
Porque encender la luz cuando no alcanza
es resistencia: fe que no se cansa.
JUSTO ALDÚ © Derechos reservados 2025