Antonio_cuello

Después de un adiós

Duele mucho un adiós...

queda un vacío en la herida que se abre,

el alma se parte en dos

Se escuchan los sollozos en el ocaso de la tarde,

al unísono de los silencios que anuncian el adiós

 

Un adiós se cuece en el mutismo,

de frases inconclusas de la promesa vana,

arde en el núcleo del fuego del cansancio

derivando las cenizas de soledad temprana,

en la vasta ascendencia después del adiós

 

Surge la desolación después del adiós,

dando paso a una devastadora resignación

No hay nada mas triste que sentirnos solos

en medio del bullicio de la urbe que trasgrede,

desfilando en los olvidos del amor que muere,

como muere la tarde después de un adiós.