Siempre veo al final el barco en la neblina,
la luz reparadora en el camino de la venganza,
que se difumina siempre en perdón y misericordia,
no hay mayor castigo que la voluntaria ignorancia.
Soy como el naufrago que busca y encuentra la isla,
que se enamora de la invención propia,
no sirve de nada la queja y la auto lástima,
es mejor , mucho mejor la fe en la perseverancia.
La diversificación de las opciones y la duda,
como fuerza motivadora en la búsqueda,
el positivismo de las personas sin mascara,
al final relajan y rejuvenecen tu alma.
La esperanza de mejora, de nimia suerte irradiada,
el amor por los tuyos y ser perdedor de raza,
el que la batalla como un aprendizaje de su autoestima,
al final crea una persona que baila en el aire con la cuerda.
Que prospeciona, pondera el riesgo y la caída,
no mitifica la mala suerte ni la política,
que busca la cultura de la alegría humana,
y es feliz en la compañía etérea de la vida.🤔