DEL FORASTERO
Muchas veces
me apena estar ausente
en las fiestas
donde nadie me extraña.
Uno quiere
dejar de sentirse ajeno.
Uno a veces espera más
y a su vez
nada al mismo tiempo.
Uno imagina construir iglesias
aunque llueva
o sueña con recordar acompañado
amores indecibles.
Como si deseando lo que no ocurre
se curaran los rasguños del corazón.
Siempre es lenta
la felicidad del forastero.
Anton
Reeditado 2025