Eres un ángel de luz,
una mensajera divina,
un amor que me ilumina
todo para mí eres tú;
Vienes de ese espacio azul,
ese árbol de la vida,
la llamarada encendida:
plena ternura y virtud;
un pedacito de cielo,
ese aliento que me inflama
un viviente manantial;
eres mi auténtico anhelo
esa interminable llama
un tesoro celestial...