Regálame el beso
que mi ser pide,
regálame el verso
que mi poema rinde
un homenaje a ti
mi corazón decide
amarte, solo a ti
con el cariño puro
a ti, a ti, solo a ti.
Regálame el beso
que de ti necesito
y los mares de eso
se comportan distinto
cuando de lejos me miras
te ruego, te necesito
como todo lo que admiras;
los álamos cantan
y su aroma lo respiras.
Y regálame el beso
que abre la puerta
por eso quiero el beso
de esa boca suelta;
suelta de rocío, rosas,
que su belleza le vierta
colores a las diosas
y vida a los cerezos,
sus ojos sonrojas.
Regálame el beso
que pacte mi historia
de nosotros y el terso
gesto de tu memoria.