En suave brisa nace tu cantor,
la rosa vive envuelta en su fulgor,
despierta al albor con su rojo ardor
y al sol se ofrece llena de esplandor.
Tus petalos guardando la pasion,
parecen fuego en dulce vibracion,
perfume leve brota sin razon
y al aire envuelve toda su emocion.
Flor delicada, joya sin igual,
simbolo ardiente de lo celestial,
de tu hermosa surge lo vital,
y en su silencio habita lo inmortal.
Aunque las horas pasen sin piedad,
y el tiempo robe toda la verdad,
la rosa queda en toda eternidad,
como reflejo de la verdad.