Tú, mi vida, dueña de mi alma
Tú, mi luz para mi corazón
Tú, mi esperanza sin sazón
Tú, alambre dorado, dame tu palma.
Tus sonrisas, mil latigazos
Sobre mí soltarás,
Que a mi lomo lamentas en pedazos,
Que día tras noche lamentará.