Mamá yo quiero una pera
pero pera del peral
que tenga un sabor igual
a las peras de la abuela.
Son tan ricas esas peras
con dulzor de gran delicia
que hasta la misma gatita
la come junto a la perra.
Mamá yo quiero una pera
sin importar el peral
ya que de tanto esperar
me comería cualquiera.
Es bueno saber que los altos niveles de exigencia en pedir las cosas, dificulta su obtención.
Alejandro J. Díaz Valero
Maracaibo, Venezuela.