Cae la noche y vuelvo a desvelarme;
miro el cielo y vuelvo a pensarte,
miro la luna y tu sombra aparece.
Sopla el viento y en él todavía te siento;
cae la lluvia y con ella me quiebro lento,
y al ver las estrellas, dejé ir mis pensamientos.
Entendí que soltar también es amar.