Freddy Kalvo

¡Dignatario!

Es un genio del absurdo

un titán de la mentira

un fantoche que delira

en sus sienes, lo más burdo.

¿Me disculpa si lo aturdo?

¡Cómo digo lo contrario,

si lo veo siempre a diario!

Va mostrando su locura

la que absurda más perdura,

si le dicen: ¡dignatario!

 

Es audaz del diente al labio

un espíritu maligno

que aparenta ser benigno

pero carga su resabio.

Dicen muchos: —«es un sabio».

Yo no creo, para nada,

si con filo de su espada

la conciencia te enajena

y en verdad, con mucha pena,

mucha gente va engañada.

 

Es un pulcro en el desagüe

que se va a la alcantarilla;

pero miren… ¡maravilla,

aunque el bien con mal lo pague!

Quien su verbo más lo trague,

traga siempre más desgracias

pues abundan, las falacias.

Pero el “ciego” ve fortunas

revolcándose en las dunas

y es el colmo… ¡dando gracias!

 

Es un rey con muchas mañas

tejedor de sueños falsos

y también de los cadalsos

donde mata con sus sañas.

No le duelen las entrañas,

nunca siente el sufrimiento

pero es bueno, con el cuento,

¡que trabaja por los pobres

que, aunque bebe aguas salobres,

con el rey está contento!

 

Es un Judas Iscariote

que les besa la mejilla

y no saben que maquilla

esos besos con azote.

¿Quién entiende con garrote,

quién entiende con palabras?

«Cuando tú la tierra labras

van saliendo suciedades.

Y aparecerán verdades

cuando las pupilas abras...»