Quinteros Fabian

Sin querer y para siempre (versión 2)

 

  SIN QUERER Y PARA SIEMPRE (versión 2)

Sin querer, tu nombre se volvió un susurro que entendía mi alma, una luz pequeña que encendió inviernos, una caricia que llegó sin permiso y se quedó en mis días como si siempre hubiera sido su hogar.
  Sin querer, mis manos aprendieron tu forma, mis ojos tu manera de mirar el mundo, y mi voz cuando te nombra sabe que pronuncia algo más que un nombre:
  Pronuncia destino.
  Y para siempre, te guardo en el rincón donde nacen las promesas verdaderas, en la memoria tibia de los abrazos
que no piden razones porque ya lo tienen todo.
  Para siempre, aunque el tiempo cambie de rostro, aunque el cielo se deshaga de estrellas, aunque la vida nos pruebe con sombras, lo que siento por vos será esa llama que no retrocede, ese latido que te reconoce, ese amor que llegó sin querer, y se quedó para siempre.