Todos quisimos morir en un momento,
capaz fue un corazón roto, una familia rota, un momento que te destruyó.
Pero después sales por la puerta con una sonrisa en el rostro,
hablas con tus amigos y te ríes, sonríes genuinamente,
y te das cuenta que esos momentos rotos pasarán, se olvidarán.
Capaz te demores semanas, meses, años, pero pasarán.
Te acuerdas de tus sueños: capaz una casa, una mujer hermosa,
una vida suficiente y feliz, algo que capaz te falta ahora;
y decides seguir, esforzarte, hasta lograr lo que nunca tuviste.
Y por un momento, por un pequeño instante, se te olvida lo roto que estás.