Poesía Herética

Ven

 

Para quien ha llamado a la sombra y ha encontrado en su frío un fuego que desvela; para quien reconoce en lo lúgubre no solo un canto de crepúsculo, sino un reclamo íntimo que desgarra y apresa. Que estos versos sean el eco de aquella entrega donde la muerte y el deseo se funden en un mismo abrazo, y el alba, al morir, se convierte en la más trémula y eterna de las delicias.