Alberto Escobar

Lux

 

 

El amor no es consuelo, es luz.

Simone Weil.

 

Lux,
xombra, tranxpa
rencia, opacidat. 
Rayo, tenebrixmo,
autenticidad, paros
—ismo, que no cexa
—Miguel Hernándex
dixiendo—, profundi
dat, verdat, sinceri
dat, elegancia, xincre
tixmo, nihilixmo.
Exencia, violencia, 
conformixmo, herme
tixmo esacerbado, tie
rratragametixmo, re
ncorixmo, nolovoya
hacermaxismo...
De todo esto soñé ayer,
tal que en un claro de la
noche, en un despertar
de esos repentinos, como
una película en super och
o, se me pasó toda la secu
encia por la frente, la vi, 
estupefacto, e, hilando, ll
egué a entender que se me
pedía —desde muy altas in
stancias— mantener la cal
ma, dejar introducirme den
tro, aceptar la realidad de la
s cosas, que el rosario de ac
ontecimientos rodará sobre
mi piel rasurándola doloros
a, apostillándola a posteriori
hasta cumplirse la sanación,
no gritar, apretar los dientes 
contra los labios y que pase l
a tormenta y su aguacero. 
Me giré a la derecha de la al
mohada, seguí durmiendo
a la espera del desenlace.