Existen amores jamás contados,
encerrados en el tiempo,
olvidados en el pasado.
Corazones inertes, estáticos,
que han soportado en su interior
un fuego ardiente que ama y siente.
Recuerdos que devuelven sonrisas,
que traen lágrimas y dolor al alma,
que invocan un nombre
que se pierde en la distancia.
Penas tan grandes que el cuerpo carga,
que enferman y lentamente matan.
Rosaura Gerónimo Santiago.