Empújame a falta de alguna persiana rival,
así alcance en carrera a martirizarte a ti igual
y se preste la épica tan siempre a más,
la quizás realeza de esos rostros atrás.
Hoy me hundía e hice vértigo en mi ruina de aposentos,
confundido que me fui atento adentro ante tal futilidad
dada sin causa en un oasis primordial fuera del mundo
como mal se conoce, aún más por los grados logrados entonces
te podrás desbocar elegido para ser loco por un astro remoto.