Una suave caricia
Moldea tu silueta.
El viento sabio y tranquilo del mediodía
Acompaña tus pasos
Mientras hipnotizas la percepción.
Entre la soledad y tu presencia
Leo este libro de la vida
Y desconozco la voz
Que nos relata.
Aquel viento
Sabio y gentil
Que nos acariciaba
Se transforma en huracanes.
Todo se crea por una razón,
Y ante el dolor y el sufrimiento
Corro hacia el amor,
Donde tu nombre es sinónimo
De amar.
El viento suave del mediodía
Me susurra lentamente tu nombre.
Y ante los pocos o muchos que me lean,
Repito con voz profunda
Dos sustantivos que crean el mundo:
Mirella Leonor.