Mari.o

SENDEROS DE ILUMINACIÓN

SENDEROS DE ILUMINACIÓN

Ecos de una niebla sagrada

de volutas y zarcillos

que vadean y perfuman

valles y montañas. 

 

La ralea del canto 

de los hombres, acae

como aliento que liba 

los delicados retoños

de lotos y damascos. 

 

II

Oh, el herrumbe de las montañas,

centinelas del desierto. Cenagosos 

sus caminos, de hollados 

acantilados donde rielan 

sus despeñaderos. 

 

Distendido el boyante ulular

del viento que arrostra

al fragor de los truenos.